Desde que su esposo muriera hace once años, Nadia ha estado ocupada yendo de fiesta y trabajando para mantener la cabeza ocupada. Ahora, de acuerdo al extraño testamento de su padre, Nadia tendrá que encerrarse en un ático de Dallas. Su toque de queda es a medianoche y no se le permitirá ver a ninguna de sus amigas o ir a trabajar. Si desobedece estas condiciones, perderá toda su herencia. ¿Cuál es la intención de mi padre al mantenerme encerrada? Dos meses después de que comenzara esta vida solitaria y deprimente, su vecino del ático, que había estado ausente, aparece de repente frente a ella. ¡Pero nada más verlo, Nadia se desmaya de la impresión!
